Una guaya de freno cercenó cuatro dedos de una mano a conductor de motocarro
Los médicos no podrán reimplantarle los dedos porque apenas los encontraron en la mañana de este miércoles y el accidente fue en la noche del martes.
Parte de una mano con cuatro dedos fue hallada en la mañana de este miércoles en el barrio Prado Soledad, en cercanías a la estación de buses de Coolitoral, en el área metropolitana de Barranquilla. El hecho causó alarma entre sus habitantes.
Muchos se imaginaron que había un cuerpo desmembrado cerca al lugar del hallazgo de la mano y dieron aviso a las autoridades para que se apersonara de la situación.
Uno de los cuatro dedos tenía un anillo plateado, y eso ayudó a las autoridades a desvirtuar el rumor del desmembramiento, ya que a la clínica Campbell había ingresado un joven que en la noche anterior había perdido parte de su mano en un accidente.
Su nombre es Wilfer Farid González Ortiz, tiene 24 años, y por un accidente perdió cuatro dedos de la mano izquierda, que según los médicos, no podrán reimplantárselos.
Fernando González, padre del joven, contó que la Policía lo contactó esta mañana para informarle sobre el hallazgo de la parte de su mano de su hijo.
"La Policía nos entregó los cuatro dedos, pero los médicos nos dijeron que no se puede hacer nada para reimplantarlos", dijo su padre.
El trágico accidente ocurrió en la noche de este martes, cuando Wilfer se transportaba como pasajero en su motocarro mientras un amigo conducía el vehículo. Fue cuando una guaya de repuesto le cercenó los dedos. "Él venia enrrollando una guaya, pero una parte se enredó con la llanta trasera, el conductor frenó, la guaya se tensionó y le cortó parte de su mano", explicó Fernando González.
De inmediato a Wilfrid Farid lo llevaron a la clínica Adela de Char. Allí le prestaron los primeros auxilios pero después de una discusión de su padre con el cuerpo médico de ese centro asistencial fue remitido a la clínica Campbell.
"Por la oscuridad, no pudimos encontrar su mano. Pero lo llevamos así para que le calmaran el sangrado fuerte que tenía. Está mañana nos llenamos de ilusión cuando apareció la parte de la mano, pero todo fue en vano porque nos dijeron que no se podía reimplantar", relató el padre.
El joven de 24 años permanece en la Clínica Campbell recibiendo atención médica, y según el padre, ya está consciente de que no podrá volver a tener sus dedos completos en su mano izquierda. "Él está tranquilo, ya tiene conocimiento de su problema".
Wilfer González trabaja como conductor de un motocarro hace 3 años. Su patrón quien también se encontraba en la clínica, manifestó que es uno de sus mejores trabajadores, y que pese a su accidente, lo espera a que se recupera para que vuelva a realizar sus labores. "Con la mano izquierda se pone el cloche, pero se puede poner en el pie para que siga trabajando", indicó el patrón de Wilfer.